¿Sabías que reírse es una de las mejores cosas que podés hacer por tu salud? Y no sólo porque es lindo pasarla bien, sino porque te hace bien al cuerpo y a la cabeza.

Menos estrés, más alegría:

Cuando te reís, el cuerpo genera endorfinas, que te levantan el ánimo y te hacen sentir liviano, como después de una buena charla con amigos. Además, te baja el cortisol (la hormona del estrés). Reírse es como decirle al cuerpo: “Tranquilo, está todo bien”.

  • Corazón contento, vida plena:

La risa pone a trabajar el corazón de forma sana. Aumenta la circulación, relaja los vasos sanguíneos y baja la presión. 

  • Defensas a tope:

¿Viste cuando decís “me bajaron las defensas”? Bueno, reírte hace lo contrario. Aumenta la producción de anticuerpos y mejora la respuesta inmunológica. Es como si cada carcajada fuera un mini escudo anti gérmenes.

  • Dormís realmente bien:

Después de una buena risa, quedás tan relajado que dormir se hace mucho más fácil. Chau vueltas en la cama, hola dormir en paz. Reírse antes de dormir debería ser receta médica.

  • Oxígeno para el cuerpo y el alma:

Cuando te reís, respirás más profundo, llenás los pulmones de aire fresco, y eso hace que todo tu cuerpo se recargue. Es un respiro en todos los sentidos.

  • Presente consciente:

Reírte te pone en el ahora. Te saca de la nube de pensamientos, de las preocupaciones, y de lo que fue o lo que vendrá.

Así que ya sabés, la risa no es solo un momento de alegría: es salud.